YANKEE DOODLE:

De cómo una canción infantil se convirtió en el himno de una revolución


La Revolución Norteamericana de 1776 creó dos grandes emblemas: la bandera con las trece barras y estrellas y  la marcha,  Yankee Doodle, que traducido viene a ser Yankee Paleto.  Es posible que este himno - junto con La Cucaracha, canción muy popular entre los mariachis que acompañaban a los Dorados de Pancho Villa en la Revolución Mexicana- sean los cánticos más impropios para enardecer al pueblo que participa en una revolución jamás compuestos.

 La letra tiene, desde luego, poca carga épica .

Un yanqui viaja a la ciudad,
cabalga sobre un pony;
lleva una pluma en el sombrero,
y grita macarroni (la traducción sería hortera).
Yanqui, eres elegante,
Yanqui, siempre así serás;
Yanqui, a todas las chicas,
¡tú conquistarás!

Padre y yo bajamos al campo
con el Capitán Gooding
y allí los vimos de hombres y muchachos,
Tan espeso como el budín recién hecho.

Coro

Del yanky paleto ten cuidado
del yanky paleto y elegante
que piensa en la música y el baile
y con las muchachas va a lo práctico

Y estaba el Capitán Washington
Sobre un semental espléndido
Dando órdenes a sus hombres
que parecían un millón.

Coro

Y luego vimos un gran cañón
grande como un tronco de arce
montado y conducido sobre una carreta
de la que tiraba el ganado de padre.

Coro Y siempre que lo disparan
consume un cuerno de polvora
y hace un fuerte ruido como el
de la nación más fuerte.
Primeramente, hay que aclarar que el tema de los himnos nacionales no se tomaba tan en consideración, en casi ningún país, antes de que se asociaran a los eventos deportivos como la SuperBowl o los Juegos Olímpicos. Había, eso sí, una serie de marchas revolucionarias que tenían gran popularidad y que se convertían en grito de guerra cuando las masas irrumpían en escena (los ejemplos más evidentes son La Marsellesa y, más tarde, La Internacional o La Varsoviana.)

El actual himno, La Bandera Estrellada se compuso bastante después de la Revolución. En 1814, tuvo lugar un conflicto entre los Estados Unidos y Gran Bretaña. La marina inglesa cañoneó la ciudad de Baltimore y, en el fragor de la lucha, un poeta, Francis Scott Key, vió la bandera de la Unión, casi hecha jirones, ondear a duras penas sobre el fuerte McHenry y eso le inspiró este otro canto, mucho más heroico y belicoso. De todos modos, esta canción no era tan popular como el Himno de Batalla de la República, que entonaron los soldados del Norte durante la Guerra de Secesión.
 
Pero vamos al grano. ¿Cómo llegó a convertirse Yankee Doodle en un himno revolucionario?
Para entenderlo, tenemos que remontarnos a los tiempos en que el dominio sobre Norteamérica se repartía entre franceses y británicos. Entre 1755 y 1763 tuvo lugar un conflicto internacional que implicó a muchos Estados (entre ellos España). Esta Guerra de los Siete Años tuvo numerosos escenarios, desde la India a Canadá, pasando por los campos europeos. Los colonos norteamericanos la llamaron  Guerra contra los franceses y los indios. 



 Esta guerra fue especialmente sangrienta por el hecho de que los franceses estaban aliados con los indios algonquinos y los británicos con los indios iroqueses. A diferencia de otros escenarios bélicos, la forma de hacer la guerra afectó mucho a la población civil, ya que los pueblos nativos aprovechaban para atacar y destruir los establecimientos de los colonos en la frontera y, con las granjas, a las familias que las habitaban. Relatos como El Último de los Mohicanos, del que ponemos un corte, ilustra muy bien lo que pasó. Posiblemente, una clave para que los británicos se terminasen apoderando de Norteamérica estuvo en que los colonos se implicaron a fondo en la lucha y constituyeron milicias coloniales para defender sus haciendas, familias y su propio pellejo.

El caso es que el peso de la lucha y los mayores costes humanos habían recaido, además de sobre los pueblos nativos, en estos colonos. La leyenda cuenta que, en el transcurso de esa guerra, una columna de milicias coloniales se unió  en Niagara a las fuerzas profesionales del general Braddock. Mientras que los granjeros en armas vestían harapos y mostraban modales groseros, los casacas rojas lucían uniformes impecables, pelucas empolvadas y sabían desfilar en orden cerrado de forma disciplinada. Sus oficiales eran lo más estirado de la aristocracia inglesa, hablaban con afectación y miraban por encima del hombro a los colonos. El choque entre los señoritingos europeos y las gentes de la frontera estaba servido. Los colonos, por su parte,  hablaban, en tono desafiante, de sus hazañas bélicas  frente a los indios, lo cual se tomaban a risa los oficiales aristocráticos, ya que, para ellos, los nativos apenas eran una banda de salvajes.

Era tal el pique que un cirujano militar inglés, el Doctor Richard Schuckburg, adaptó la canción infantil Yankee Doodle para intentar poner en ridículo a los de las milicias coloniales, pintándoles de paletos. Error. Los norteamericanos se picaron aún más y modificaron la letra, introduciendo el estribillo que dice que, como se encuentren con las señoras de los casacas rojas, se las van a ligar y se las van a llevar a la cama... 
 
Inglaterra se convirtió, tras la guerra, en la primera potencia mundial. Canadá, India y la orilla oriental del Mississippi eran suyos. Pero el tesoro estaba en la ruina. La subida de impuestos a los colonos iba a abrir una crisis política en la que, los norteamericanos, inspirados por las ideas de La Enciclopedia, crearían una nueva república. Tuvieron que luchar contra la metrópoli durante 6 años más para lograr su objetivo.

 

  
En el transcurso de la guerra revolucionaria, los norteamericanos fueron agregando nuevas estrofas, que ponían de manifiesto que esos señoritos europeos, además de blandengues, estaban siendo derrotados en toda línea.

Por fin, y con ayuda de fuerzas francesas y españolas, el ejército británico, cercado en Yorktown, se vio obligado a rendirse en 1781. Para mayor pitorreo, mientras el general Cornwallis firmaba la capitulación, la banda militar norteamericana interpretaba el Yankee Doodle.


 
Fuente consultada http://clubrepublicano.org/yankee.htm


 





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